Un cambio y aceleración en Transformación Digital de las AAPP

  • Opinión

Cuando evaluamos las inversiones en las AAPP, actuales y en los próximos años, no debemos generalizar ni simplificar lo que ha supuesto y supondrá en los ciudadanos.

Fernando Feliu

Global customer solutions director, V-Valley, the Value of Esprinet Group

Empecemos por la implantación de los fondos de la UE, donde se ha dado un cambio en el proceso de aportaciones, debido a la situación provocada por la pandemia, llegándose a hablar de un “proceso hamiltoniano”, lo que supone un hecho histórico en la recaudación de los fondos de inversión ya que, por primera vez en la historia de la UE, este endeudamiento es global y no contribuciones de cada uno de los países miembros que la componen.

Una vez recabados dichos fondos, se han repartido en los diferentes estados miembros para combatir o contrarrestar la pandemia producida por la COVID, y ha dado origen a la aceleración de la digitalización de muchos procesos y, por tanto, a la aplicación de nuevas tecnologías, hasta el momento no explotadas, acercándolas al ciudadano y dotándoles, independientemente de si eran zonas rurales, al tamaño de las ciudades, comunidades o en un ámbito nacional de modelos de interactuación disruptivas, pero más igualitarias.

Indiscutiblemente esto ha influido en la forma de interactuar con ellos, en el caso de que fuera necesario, ya que hay mucha inversión de tipo interno, prevaleciendo la seguridad de su salud debido a la pandemia.

En este punto había que crear primero las infraestructuras de intercomunicación segura y replantear nuevos métodos digitales para poder contactar con ellos y sus datos, ya que no todos, independientemente de la edad, estaban maduros en las herramientas digitales.

Así, áreas como la Educación o la Sanidad han sido foco en esta digitalización. ¿Quién no tiene un hijo en edad escolar que no haya recibido formación en remoto? ¿Quién no ha recibido una citación para vacunarse o hacer un cita para visitar al médico de forma telemática? Pensemos en estos casos con un poco de profundidad.

Replantearse las necesidades de colegios o universidades para poder interactuar con los alumnos ha supuesto un cambio de necesidades y de mentalidad, tanto de alumnos como del profesorado, que ha traído consigo un cambio en el modelo y las herramientas necesarias para poder mantener una “normalidad” en el sistema educativo donde la videoconferencia, herramientas de comunicación, redes o sistemas de software educativos han transformado “digitalmente” las aulas.

Esto mismo ha sucedido en la Sanidad, donde se intentaba minimizar los contagios tanto a los profesionales como a los pacientes, dotando de herramientas tan innovadoras como la Inteligencia Artificial (sistema de citas, por ejemplo) o la telemedicina para poder atender a posibles pacientes sin un contacto físico a menos de que fuera necesario, como replanteando la utilización de las herramientas internas de los hospitales a través del IoT.

Esta última tecnología es la que también se utiliza en la trazabilidad del medicamento o en el mantenimiento de la cadena de frio en las vacunas que deben mantenerse a cierta temperatura.

No olvidemos inversiones que se están realizando para transformar nuestras ciudades en Smart Cities, con impactos en diferentes áreas de la AAPP como en las Fuerzas del Orden y Protección Civil (tanto preventivo como de tiempo de actuación ante incidente), el impacto de contaminación climática, acústica o lumínica (con resultado de ahorros de costes considerables) o el futuro de los coches autónomos con la entrada del 5G.

Todos estos cambios han hecho que se produzca, no sólo un cambio interno en las AAPP, sino también en aquellos que le aportan conocimientos y soluciones en su cadena de valor (fabricantes, reseller o mayoristas).

Dar soluciones digitales a los problemas de forma creativa y en tiempo récord, pero también cómo poder acceder a las ayudas para poder financiarlas, ha sido una de las prioridades que nos hemos planteado en V-Valley (proyecto de valor del Grupo Esprinet) desde su creación.

El contar con las marcas adecuadas en todas las tecnologías requeridas (Cloud, IoT, servidores, almacenamiento, networking, seguridad, autoidentificación, UCC…), con profesionales certificados focalizados en las ayudas en la preventa / postventa, una fuerza comercial formada e innovadora, con una gran cercanía al cliente, planteando las mejores soluciones en cada uno de los proyectos, la creación de Serviceland para poder cubrir todos los servicios que necesiten completar nuestros clientes de canal, la creación de V-Valley Academy para forma en todas las tecnologías, y casos de éxito, y a la vez informar de como acceder a estas ayudas (Next Generation y otras), hacen de V-Valley el pilar donde poder pivotar todas las necesidades que se dan en este nuevo entorno de las AAPP ayudando y colaborando estrechamente con los profesionales del canal que acercan la digitalización a las AAPP.

 

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